El gobierno estadounidense no ha emitido una decisión oficial antes del plazo legal. Organizaciones venezolanas siguen litigando para frenar la cancelación del programa. La falta de claridad alimenta la incertidumbre de miles de familias migrantes en EE. UU.

Más de 300.000 venezolanos que recibieron el Estatus de Protección Temporal (TPS) en 2021 aún desconocen si podrán seguir viviendo y trabajando legalmente en Estados Unidos.
El sábado 12 de julio venció el plazo para que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informara si extendería el beneficio, pero no se emitió ningún pronunciamiento oficial. Según la ley, esa decisión debía ser comunicada 60 días antes de su expiración, fijada para el próximo 10 de septiembre.
La falta de claridad ha alimentado la incertidumbre dentro de la comunidad venezolana, agravada por la reciente eliminación del TPS concedido en 2023, ya ratificada por el Tribunal Supremo. Además, otras vías migratorias como el parole humanitario y la aplicación CBP One también han sido anuladas, en medio de un endurecimiento general de las políticas migratorias.
Adelys Ferro, directora del Venezuelan American Caucus, advirtió que no hay base legal para asumir una renovación automática del TPS de 2021: “Mientras la página oficial y el Registro Federal no se actualicen, no hay razón para creer que fue extendido”, escribió en su cuenta de X, señalando además que las irregularidades en los tiempos del DHS se vienen arrastrando desde la administración Trump.
Ante este contexto, organizaciones como la Alianza Nacional del TPS han llevado el caso ante la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, en busca de una sentencia que extienda la protección al menos hasta octubre de 2026. El pasado 1 de agosto se realizó una nueva audiencia y se espera un dictamen del juez Edward Chen en las próximas semanas.
En mayo, Chen ya dictó una decisión parcial a favor de unos 5.000 venezolanos que lograron renovar sus permisos de trabajo antes de la cancelación del TPS. Esta resolución fue acatada sin apelación por el Departamento de Seguridad Nacional, representando una pequeña victoria para los afectados.
El TPS ha otorgado permisos de trabajo temporal a extranjeros de 16 países desde su creación en 1990, como respuesta al éxodo provocado por conflictos armados, regímenes autoritarios o desastres naturales.
En el caso de Venezuela y de otras naciones como Afganistán o Ucrania, las causas de la salida de miles de personas siguen vigentes, y la protección se ha mantenido o jueces federales han estado fallando a favor de revertir los intentos de la Administración Trump por erradicar el Estatus de Protección Temporal.
Con información de Versión Final