Valencia (22.11.2025).- Conversamos con Fran Ramírez, un profesional de gran trayectoria en materia de seguridad e investigación penal, quien nos relató su motivación tras la publicación de su libro “Perfil Telefónico” de la mano de la editorial Grupo J3V.
FR: Para mí es un verdadero gusto participar en esta entrevista y, al mismo tiempo, agradecer a la editorial Grupo J3V por la oportunidad de compartir conocimiento en materia de telefonía con el mundo a través de la publicación de mi libro “Perfil Telefónico”.
Sé que en toda entrevista suele iniciarse hablando del autor. Esta vez quiero obviar esa parte. La mayoría de las personas elige un libro por su portada, su título, una recomendación… pero sobre todo por quién es el autor. Para muchos, lo importante es conocer su experiencia, su trayectoria, su profesión; en pocas palabras: quién lo dice, más que lo que desea transmitir.
Sin embargo, considero que antes de hacerse todas esas preguntas, lo verdaderamente esencial es leer. Cuando no lo hacemos, se generan sesgos de valor que nos alejan del propósito real del conocimiento. En lo particular, coincido profundamente con Sócrates cuando dijo: “No puedo enseñar nada a nadie, solo puedo hacerles pensar”. Ese es, justamente, el espíritu de este libro.
Uno de mis amigos me dijo una vez que nunca escribiría un libro, porque “nadie está interesado en leer”, a pesar de que él mismo es un gran lector. También añadió que jamás escribiría un prólogo, porque según él “es lo que menos lee la gente”. En el fondo, tiene razón.
Esa misma preocupación la tenía Aldous Huxley. Él no temía la quema de libros, como la que ocurrió en Alejandría o en la Alemania nazi. Lo que realmente le inquietaba era algo mucho más silencioso y devastador: que la gente dejara de querer leerlos.
Huxley advertía que la verdadera amenaza para la lectura y el pensamiento crítico no era la censura, sino el exceso de entretenimiento, la gratificación instantánea y la distracción permanente. Un mundo donde las personas, saturadas de estímulos, se vuelven pasivas, conformistas y apáticas ante el conocimiento.
Volvamos a la realidad. El libro Perfil Telefónico se basa en el estudio y análisis del detalle operativo generado por la actividad telefónica. Esta actividad ya provenga de un teléfono móvil o de un teléfono fijo es el resultado directo del uso cotidiano del dispositivo.
Cada llamada realizada o recibida, así como cada mensaje enviado o recibido, deja una traza telefónica. Estas trazas no desaparecen: quedan almacenadas en los servidores de las compañías telefónicas y se registran con precisión técnica.
Es precisamente el análisis de esas trazas lo que permite reconstruir conductas, ubicar eventos en el tiempo y, en muchos casos, comprender el comportamiento del usuario detrás del teléfono.
Hoy en día, este estudio suele confundirse con la extracción de contenido o con la interceptación telefónica. Aunque las tres pertenecen al ámbito de la telefonía forense, cada una posee características técnicas propias y aporta información distinta a la investigación criminal.
De manera general, la telefonía forense se divide en tres áreas:
Interceptación Telefónica: Como su nombre lo indica, consiste en intervenir la comunicación verbal o escrita entre un emisor y un receptor. En la mayoría de los países, este procedimiento requiere autorización judicial, ya que implica acceder a la comunicación en tiempo real o a su contenido privado.
Extracción de Contenido (lo que en mi libro denomino “Perfil Telefónico Digital”): Se centra en obtener la información almacenada dentro del dispositivo móvil, ya sea un teléfono inteligente o una tableta. Esto incluye mensajes, fotos, aplicaciones, historial, documentos, entre otros. Su finalidad es recuperar el contenido digital interno para convertirlo en evidencia.
Estudio o Análisis de Trazas Telefónicas (lo que he definido como “Perfil Telefónico”): Utiliza el detalle operativo, conocido comúnmente como CDR (Call Detail Records), suministrado por las compañías de telecomunicaciones. Este análisis no accede al contenido del mensaje o la llamada, sino a los metadatos: fecha, hora, duración, origen, destino, localización aproximada, antenas utilizadas, etc.
A diferencia de la interceptación, tanto la extracción de contenido como el análisis de trazas no requieren una orden judicial, pero sí deben realizarse en el marco de una investigación penal en curso, ya que implican manejo de información sensible.
JC: ¿Cómo te convertíste en un analista de trazas telefónicas es decir, en un perfilador telefónico?
FR: Esa es una historia larga, compleja y llena de experiencias que marcaron mi carrera. Contarla aquí sería imposible en pocas líneas.
Sin embargo, toda esa trayectoria la he documentado en mi próximo libro, que publicaré bajo el título “ORION 4. EL ANALISTA”, donde narro de forma detallada el camino que me llevó a especializarme en el análisis del comportamiento comunicacional, tecnológico y geográfico de un usuario a través de sus trazas telefónicas.
El libro Perfil Telefónico no es simplemente un libro; es una guía técnica y práctica diseñada para comprender, analizar y dominar el uso de las trazas telefónicas dentro de la investigación criminal.
Considero que es una lectura fundamental para criminólogos, juristas, investigadores, y para toda persona interesada en entender cómo la tecnología celular es capaz de revelar el comportamiento del usuario, ya sea de un teléfono móvil o fijo.
La actividad telefónica cuando se sabe interpretar muestra patrones, conductas, desplazamientos y hábitos. Por eso sostengo una de mis frases más representativas: “El teléfono habla por nosotros incluso en nuestro silencio.”
JC: usted cuenta con varios años de experiencia en el ámbito del peritaje técnico en telefonía. ¿Podría contarnos cómo esa trayectoria profesional lo llevó a escribir Perfil Telefónico y qué aspectos de su formación y práctica considera fundamentales para la elaboración de esta obra?
FR: Mi trayectoria en el ámbito del peritaje técnico telefónico estuvo directamente vinculada a mi trabajo dentro de la administración de justicia penal en Venezuela. Durante años estudié cómo el comportamiento del usuario tanto de teléfonos móviles como fijos se convierte en una pieza clave para reconstruir un hecho, identificar patrones y comprender su conducta antes, durante y después de un crimen.
Ese recorrido profesional, acompañado de casos reales, dictámenes, formación técnica y experiencia de campo, me permitió comprender algo fundamental: existía una necesidad urgente de unificar criterios, aclarar conceptos y ofrecer a investigadores, peritos, jueces, defensores y fiscales una herramienta metodológica clara, útil y didáctica. De esa necesidad nace Perfil Telefónico.
No es un libro teórico escrito desde la distancia; es una obra construida desde la práctica. Cada capítulo responde a vacíos que observé durante años: confusiones en el uso del término “torre telefónica”, entre otros, errores en la interpretación de trazas, desconocimiento del valor probatorio y ausencia de una metodología sólida para el análisis. Siempre he dicho que este libro nació del trabajo cotidiano, del contacto directo con las investigaciones y del compromiso con la verdad técnica.
Mi labor en el peritaje telefónico me permitió ver cómo una traza, un registro o una celda pueden cambiar por completo el rumbo de una investigación penal. Pero también evidencié errores comunes, vacíos conceptuales y la falta de una guía que ordenara y explicara los elementos esenciales de la telefonía aplicada a la investigación criminal.
Perfil Telefónico surge precisamente de esa realidad: de la práctica diaria, del aprendizaje obtenido en el campo y del propósito de ofrecer una herramienta seria, clara y útil para operadores de justicia, investigadores y peritos.
JC: En su libro aborda temas esenciales del peritaje telefónico y su papel dentro de la investigación penal. ¿Podría explicarnos por qué este tipo de análisis adquiere cada vez mayor relevancia en el contexto venezolano y otros países?
FR: El peritaje telefónico ha adquirido una relevancia creciente en Venezuela y en otros países porque, hoy en día, toda actividad humana deja un rastro digital. En investigaciones de secuestro, homicidios, extorsiones, desapariciones e incluso casos de corrupción, la telefonía se ha convertido en una herramienta determinante.
En un contexto donde la criminalidad se ha sofisticado y los delincuentes utilizan medios tecnológicos para operar, el Estado y los investigadores necesitan conocimientos sólidos para interpretar correctamente la información que generan las redes de telecomunicaciones.
A esta realidad se suma la complejidad del entorno procesal venezolano, marcado por:
Escasez de formación técnica estandarizada
Uso incorrecto de conceptos
Falta de claridad en dictámenes
Confusión entre orientación y certeza
Necesidad de fortalecer la cadena de custodia y la comunicación entre operadores de justicia
Por todo ello, este libro cobra especial importancia: traduce lo técnico en algo comprensible, útil y aplicable. No solo explica, sino que enseña a pensar la telefonía desde un enfoque investigativo, metodológico y ético.
En el mundo existe además una necesidad urgente de formación técnica que corrija errores frecuentes en el uso de conceptos, interpretaciones apresuradas de registros y desconocimiento del valor probatorio de las trazas. En un entorno donde la criminalidad se ha tecnificado, el peritaje telefónico resulta fundamental para esclarecer hechos con precisión y rigor.
Porque todo lo que hacemos deja un rastro digital. Como dije anteriormente “Incluso en silencio, el teléfono habla por nosotros”.
JC: Desde el punto de vista técnico, ¿cuál considera usted que es el aporte más significativo que Perfil Telefónico ofrece a los actores involucrados en la investigación penal? ¿Por qué cree que esta obra resulta especialmente pertinente para el profesional contemporáneo?
FR: El aporte más significativo de Perfil Telefónico es que organiza, unifica y explica con claridad la metodología de análisis del perfil telefónico, integrando tres dimensiones fundamentales:
Comportamiento Comunicacional
Comportamiento Tecnológico
Comportamiento Geográfico
Estos tres pilares permiten comprender cómo se mueve, cómo se comunica y cómo se relaciona un usuario a través de su teléfono, y de qué manera esa información puede interpretarse correctamente dentro de una investigación penal.
Además, el libro aporta:
Claridad conceptual (celda, sector, TRX, detalle operativo, entre otros).
Explicación del valor probatorio.
Estructura para la elaboración de dictámenes.
Criterios para distinguir entre pruebas indiciarias y directas.
¿Por qué es relevante hoy? Porque en la actualidad el profesional del derecho, el investigador y el perito no pueden depender únicamente de la intuición. Necesitan comprender el alcance real de las trazas telefónicas y saber utilizarlas técnicamente, sin vulnerar garantías, sin caer en interpretaciones erróneas y sin comprometer la investigación.
Perfil Telefónico entrega precisamente eso: herramientas para pensar, no para repetir. Aporta metodología, aclara conceptos, define el alcance de cada registro y enseña a elaborar dictámenes con rigor técnico. Es una obra diseñada para comprender la telefonía desde un enfoque investigativo, metodológico y ético.
JC: Finalmente, para lectores que desean adquirir su obra, ¿podría indicarnos cómo pueden hacerlo?
Los lectores pueden adquirir Perfil Telefónico a través de los canales oficiales actualmente disponibles:
Grupo J3V
Quares Editorial
Lemon Venezuela
Amazon
Los enlaces directos y las actualizaciones sobre disponibilidad se publican frecuentemente en mis redes sociales, especialmente en Instagram: @franrjose, donde también comparto novedades y material complementario relacionado con el libro.
Nota de prensa


