Este 13 de diciembre, dos aviones de guerra electrónica Boeing EA-18G Growler de la Marina de los Estados Unidos fueron observados sobrevolando las costas norte de Venezuela, según datos de la plataforma de seguimiento aéreo Flightradar24.
Los aviones, que volaban a más de 8.000 metros de altura y alcanzaban velocidades de casi 700 km/h, realizaron patrones de vuelo típicos de misiones de vigilancia y guerra electrónica, pero permanecieron en el espacio aéreo internacional.
El EA-18G Growler es un avión especializado en guerra electrónica, diseñado para interferir con las defensas aéreas y las comunicaciones del enemigo. Estos aviones utilizan equipos avanzados como el Next Generation Jammer para bloquear radares, misiles y sistemas de control del adversario, protegiendo así a otras aeronaves.
En el contexto de operaciones militares, los Growler son esenciales para recopilar inteligencia y probar las respuestas de las defensas aéreas del enemigo.
Este vuelo de los Growler es parte de un creciente despliegue militar de Estados Unidos en la región del Caribe. En las últimas semanas, se ha intensificado la presencia de aeronaves y buques de guerra, incluido el portaaviones USS Gerald R. Ford, que se encuentra en la zona realizando operaciones conjuntas con otros activos militares.
El gobierno de Nicolás Maduro ha respondido a estos movimientos militares acusando a Estados Unidos de realizar maniobras intimidatorias y de aumentar la presión sobre Venezuela. Mientras tanto, la comunidad internacional observa con atención este aumento de la actividad militar estadounidense en el Caribe, una región clave para la geopolítica mundial.
Este nuevo despliegue de los aviones Growler subraya la importancia estratégica que Estados Unidos le otorga a la región, especialmente en un contexto de creciente tensión con Venezuela y otras naciones del Caribe.
Con información de Versión Final
