Funcionarios de la Policía Municipal de San Diego le pusieron los ganchos a un hombre que había retenido contra su voluntad a su ex pareja y la mantenía maniatada en una residencia de la urbanización La Esmeralda, manzana G-2.
Fue identificado como Orlando Fernández, de nacionalidad cubana. El caso se descubre, luego que un vecino se acercara a la vivienda de Fernández a solicitarle que moviera su carro porque le estaba cerrando el paso a su portón, y se percata que “algo” raro estaba ocurriendo en esa casa, por cuanto decide dar parte a las autoridades.
Una vez que la policía llega a la casa anteriormente señalada, encuentra a una mujer amordazada y maniatada, se trata de la ex pareja de Fernández, quien utilizando una mentira la llamó al celular diciéndole que se encontraba afectado de salud y le pidió que le llevara un medicamento.
La mujer accedió a la petición de Fernández, y cuando llegó a la casa, ingresó y fue objeto de abuso psicológico, maltrato verbal y físico, sometiéndola al punto que no le permitía pedir auxilio debido a que la había amordazado y le sujeto las manos para que no se defendiera.
Una vez que la mujer fue liberada por la PMS, lloraba desconsolada presa de los nervios por lo sucedido. El caso pasó a la orden del Ministerio Público.