El ex parlamentario y defensor por los derechos civiles, Rafael Narváez, aplaudió la decisión tomada de manera unánime por la sala de apelación de la Corte Penal Internacional (CPI) el pasado primero de agosto.
Recordó que ese día fue determinado que existen «motivos razonables para creer » que el fiscal de Karim Khan incurrió en un conflicto de intereses en la investigación sobre crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela por funcionarios del Estado.
Indicó que es una ofensa y burla al dolor , angustia y sufrimiento tanto de las víctimas como sus familiares que nunca han bajado los brazos en la búsqueda de justicia internacional, por qué el Estado venezolano siempre se las negó.
«El abogado Karim Khan actuó como un agente encubierto en la CPI , supo disfrazarse como un verdadero doliente de las víctimas de crímenes de lesa humanidad ocurridos en el año 2017 en nuestro país ejecutados por el Plan Zamora y al final no fue así» expresó el abogado defensor.
Manifestó que algo grave de su conducta se reflejó en dos episodios jurídicos. El primero fue cuando todos los recursos intentados se desestimaron por esta instancia.
El segundo, fue cuando como fiscal general de la CPI exigió al Estado venezolano presentar avances de la investigación y establecer responsabilidades.
«El Estado dando respuesta presenta un informe demasiado extenso, intentando demostrar que habían procesado penalmente y sentenciado a funcionarios policiales. Este luego fue evaluado por los jueces de la sala de apelaciones, quienes al final lo rechazan de forma unánime».
Destacó que el fiscal nunca dió el paso de sustanciar los casos con elementos de convicción que existen de sobra. Además, congeló el expediente por los intereses que hoy día determinó la sala de apelaciones.
Exigió Karim Khan pedir perdón a las víctimas de violaciones graves a los DDHH y crímines de lesa humanidad, por su condición reprochable y por vergüenza. «Le haría un bien a la CPI entregar el cargo».
Nota de prensa
